A menudo son las situaciones que se nos presentan en un banquillo de finales de cuarto con pocos segundos en el reloj, en algunas nos tocará defender y en otras atacar. Es frecuente, que el equipo con posesión del balón utilice uno de sus tiempos muertos para organizar un movimiento ofensivo para intentar conseguir algo positivo en su último ataque, en principio.
En este tipo de situaciones condiciona sobretodo el saber desde donde se pone la pelota en juego, las faltas de equipo del conjunto que defenderá y los quintetos para estos últimos segundos. Son factores que hay que tener muy en cuenta a la hora de diseñar un planteamiento ofensivo y una respuesta defensiva al mismo.
Pues bien, nos situamos en el cuarto partido de la serie entre Valencia y Real Madrid con 15 segundos para la conclusión del primer cuarto. Emanuele Molin solicita un timeout con su equipo en posesión del balón que será puesto en juego tras saque de fondo de su pista trasera.
La respuesta de Svetislav Pesic no se hace esperar, empieza poniendo un quinteto en pista formado por dos bases (Cook y De Colo), Richardson como alero, Pietrus y Lishouk como postes. Evidentemente la idea del Serbio es la de presionar la subida del balón y lo hace saltando en 2x1 hasta medio campo sin importarle los cambios en los emparejamientos defensivos. Una vez consigue el objetivo de consumir el máximo de segundos posibles para que el balón pase de medio campo, ordena hacer una falta personal sin que el jugador atacante esté en situación de tiro, con lo cual el Real Madrid sacará de banda puesto que su equipo no está en ¨bonus".
A estas alturas, la jugada a Pesic le sale perfecta y el equipo rival se dispone a sacar de banda con tan solo 3 segundos para el final del cuarto. Por supuesto, el conjunto valenciano sigue insistiendo en su defensa individual y el Madrid no es capaz de tirar antes de que se termine el tiempo.
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